Tus colores
La tarde pasa como haces de luz a través de la ventana y escucho su risa desde el fondo de la habitación, pero no está allí. Esa habitación es un acto ficticio de lo más profundo de mis deseos, quisiera que existiera, quisiera que él estuviera ahí y escuchar su risa mientras yo pinto este óleo. Sólo escuchar su risa cínica. Sólo mandar un mensaje a mis sentidos, algo que pintar. ¿Cómo expresar con colores su risa? Los más vivos… y algo de negro en una esquina. Pero sé que no me bastaría, quisiera luego pintar sus pensamientos, pero esos sí que son imposibles. Quisiera seguramente pintar su pequeña estupidez. Tendría color celeste, quizás por nuestras aventuras a cielo abierto.
Pero no estás, y este cuadro solo tiene mis colores por ahora.